
Identificar a tiempo factores de riesgo y fortalecer las relaciones personales puede salvar vidas
Psicólogo de Clínica Tarapacá entrega elementos clave para definir si es urgente consultar con un especialista. Alternativas como la telemedicina permiten diagnósticos y tratamientos oportunos.
Según datos registrados por la Organización Panamericana de la Salud (OPS), nuestro país se ubica en el sexto lugar de Latinoamérica con más tasas de muertes registradas por suicidio. Esta alarmante posición es respaldada por datos locales: en Chile dos de cada diez personas padecen problemas de salud mental, y cerca de mil ochocientas fallecen por muertes autoinfligidas al año.
En Tarapacá la cifra no es tanto más alentadora. Si bien la región presenta la tasa más baja a nivel país con un promedio de 8,06% muertes por cien mil habitantes, el número de casos experimentó un alza de 0,53 puntos porcentuales entre 2010 y 2014 (donde se registró un índice de 7,78%) y el periodo de 2015 a 2019 (que arrojó un 8,31%), tal como lo constata el más reciente Informe de Mortalidad por Suicidio del Ministerio de Salud. De todas maneras, el valor se ubica por debajo del promedio nacional de un 11,17%.
De cara al Día Mundial para la Prevención del Suicidio, diversos especialistas advierten la necesidad de promover acciones colectivas que permitan atender esta urgencia de salud pública, poniendo especial foco en los factores de riesgo y en las señales de advertencia.
En esta línea, Mauricio Salgado, psicólogo de Clínica Tarapacá señala que a menudo este problema suele estar rodeado de estigmas, mitos y tabúes, siendo muchas veces silenciados por los propios pacientes. Aquí radica la importancia de “crear vínculos sociales seguros, generar conciencia no sólo en los que se sienten bajo esta amenaza sino en todos quienes componen su círculo, porque esta situación afecta gravemente también a familias y las comunidades”, comenta la especialista.
Salgado asegura que “los suicidios son prevenibles con intervenciones oportunas, identificando a tiempo los factores de riesgo y de protección. En este sentido, es indispensable atender los efectos que generan ciertas catástrofes, situaciones límite, si hay o no antecedentes de intento de suicidio, pues son elementos que actúan de forma acumulativa y aumentan la propensión a la conducta suicida”.
El especialista también sostiene que muchos actos de este tipo pueden producirse de forma impulsiva y no necesariamente como resultado de una enfermedad mental, sino más bien en momentos de crisis o shock post traumático. Por ello es determinante que el contexto esté atento a las señales de alerta.
En relación a establecer factores de protección, Mauricio Salgado puntualiza que “fortalecer las relaciones personales, incorporar prácticas de bienestar positiva, mantener apoyo terapéutico, restringir el acceso a medios letales, es esencial. Pero también, generar las condiciones para que el acceso a la salud sea de manera oportuna,y así asegurar un diagnóstico y tratamiento a tiempo”.
En este contexto, requiere especial relevancia garantizar la disponibilidad de especialistas, algo que ha mejorado mucho con opciones como la telemedicina. “Si bien este servicio ha sido un gran aporte para todas las áreas médicas, ha tenido especial utilidad en la atención psiquiátrica y psicológica porque permite obtener a tiempo una primera aproximación e identificar si se está en una situación de riesgo o no”, asegura el profesional.
Respecto al momento idóneo para consultar, el psicólogo de Clínica Tarapacá, indica que es preciso hacerlo en cuanto una persona “presente síntomas de ansiedad, angustia, crisis de pánico, sentimiento de tristeza permanente, ideas de muerte, pérdida de interés en las actividades cotidianas o ciertos trastornos como inapetencia, falta de sueño o concentración”.
Para dar este paso, Mauricio Salgado puntualiza que el apoyo y contención familiar o de los círculos cercanos es una responsabilidad que se debe asumir con determinación. “Acercarse a los seres queridos por su salud mental y su bienestar podría salvarles la vida”, concluye.