
Senador Rossi y Fiscal Regional de Tarapacá se reunen por caso de la Universidad del Mar
De acreditarse estafa a los alumnos podrían congelarse los embargos.
El senador Fulvio Rossi se reunió este viernes con el Fiscal Regional de Tarapacá con el fin de interiorizarse en los antecedentes que ha recopilado la fiscalía respecto al caso de una posible estafa a los estudiantes de la Universidad del Mar y una eventual defraudación fiscal a través de los dineros destinados al Crédito con Aval del Estado, los cuales habrían sido usados con otros fines, como el pago de sueldos atrasados a profesores y auxiliares.
Según indicó el senador Rossi “existe una querella presentada por los alumnos en relación a una eventual estafa por parte de la mencionada casa de estudios , ya que se les prometió un proyecto educativo que no se cumplió, y hoy se encuentran en una situación muy grave. Les están cobrando los créditos, incluso, de manera judicial.
Es por ello, que quiero expresar mi preocupación debido a que aquí hay personas que ejercieron cargos importantes a nivel directivo dentro de la Universidad que hoy aparecen como miembros de sociedades espejos con las que al parecer, se ejercía lucro, como es el caso del ex rector don Daniel Grenhill y el señor Max Barrera”.
El parlamentario además explicó como funcionan estas sociedades espejo, no sólo en el caso de la U del Mar sino en otras universidades privadas a lo largo del país “estas personas, directivos de la Universidad , también eran parte de otras empresas y con ellas le prestaban servicios a la entidad, por ejemplo de arriendo de sedes, de inmobiliario e incluso del material utilizado en la carrera de odontología. Los montos de los arriendos presentaban sobreprecios y con ello habrían burlado la ley para poder recibir utilidades, otra situación grave es el uso de los dineros de todos los chilenos, que se entregaron a través del Crédito con Aval del Estado, y que fueron utilizados con otros fines y no en beneficio de los alumnos”.
En tanto el Fiscal Regional Guerra indicó que “nuestra labor se centra hoy en determinar cómo fue perjudicado cada alumno, cuál es el monto de los créditos y precisar muy bien qué fue lo que paso con los dineros de esta casa de estudio, por ejemplo: quién arrendó , vendió o cedió el terreno donde hoy funciona la Universidad de Tarapacá que estaba a nombre de “Inmobiliaria Santa Teresa” empresa creada por algunos directivos de la universidad.
El fiscal además explicó que “de demostrarse que los alumnos fueron estafados, podrían paralizarse los procesos judiciales de cobro y embargo, pero primero hay que desarrollar una serie de diligencias que sirvan de base a la juez civil para pronunciarse a favor de ello”.